18 mayo 2020
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"La pérdida de Oliver Clarke es incalculable no solo para Jamaica sino también para mí personalmente", Christopher Barnes, presidente de la SIP.
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Por Christopher Barnes

The Gleaner Company (Media) Limited, Kingston, Jamaica

La pérdida de Oliver Clarke es incalculable no solo para Jamaica sino también para mí personalmente. No creo que se pueda medir el alcance que este hombre tuvo a lo largo y ancho de Jamaica. Tocó a muchas personas individualmente y siempre tuvo el bienestar de los jamaicanos a la vanguardia de todo lo que hizo, ya sea a través de Jamaica National o de The Gleaner, una institución a la que he estado asociado durante 13 años bajo su tutela y tutoría personal.

A través de estas dos instituciones jamaicanas por excelencia, Oliver siempre se centró en lo que se necesitaba para que Jamaica y los jamaiquinos avanzaran por el camino del desarrollo y la independencia financiera en un momento dado y en cualquier circunstancia diferente. Su curiosidad natural lo colocó en una buena posición para estar al frente del Gleaner, ya que esto proporcionó un vehículo creíble a través del cual se podían formular y responder todas las preguntas correctas, y para que se presentaran puntos de vista, sin temor ni favor, todo en beneficio de Jamaica y los jamaiquinos.

Oliver tenía amigos muy cercanos y muchos conocidos, pero uno de sus mayores atributos era que incluso aquellos que se consideraban sus enemigos tenían un asiento en su mesa donde eran tratados con el respeto que muchas personas buscaban, pero que nunca podían encontrar. Usando este tacto impecable, Oliver fue capaz de superar muchas situaciones de estancamiento que resultaron en un avance en algunos temas muy difíciles, tanto para el negocio como para el país.

Fue un hombre que trazó el camino hacia la libertad de prensa que Jamaica y el Caribe en general disfrutan hoy. Muchos de los beneficios que disfrutan los medios ahora pasaron por las manos de este increíble pionero. Será siempre venerado por aquellos que entendieron y creyeron en su misión.

Personalmente, he perdido un mentor y, francamente, alguien que era miembro de mi familia. Extrañaré enormemente esos momentos invaluables del ingenio de Oliver, el humor seco de Oliver y su incapacidad para aceptar no o no se puede hacer como respuesta. Era duro, pero justo y ferozmente leal.

Oliver ha jugado un papel importante en la persona que soy, tanto personal como profesionalmente y es mi sincera esperanza de poder hacer justicia al legado que este hombre ha dejado atrás. Fue mentor y apoyó a muchos como yo y se mezcló por igual con los privilegiados y los plebeyos con interés genuino y cuidado por el bienestar de todos. Este verdadero patriota jamaicano será profundamente extrañado. Mucha fuerza para su familia en este momento de dolor y que su alma descanse en paz eterna.


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