Por Javier Valdivia, especial para la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP)
Miami (19 de diciembre de 2022) – Un periodista fue muerto a tiros este domingo en Haití, país que este año ya registra un total de nueve asesinatos de profesionales de la prensa, además de varios casos de agresiones durante el desempeño de sus funciones, y de abusos por parte de la autoridad.
Francklin Tamar, de 38 años, fue tiroteado por sujetos que viajaban a bordo de una motocicleta según reportaron medios locales. El periodista, que dirigía los espacios "Kompa, Kompa" y "Sábado Cultural" en radio Solidarité, murió camino al hospital.
El ataque se produjo al promediar las 5:00 de la tarde en el sector de Carrefour-Feuilles, en el centro de Puerto Príncipe, cuando el periodista se encontraba cerca de su casa. Emmanuel Joseph, colega de Tamar, dijo al portal de noticias Vant Bèf Info (VBI), que su compañero fue alcanzado por al menos dos proyectiles, uno de ellos en el cuello.
Como Tamar, otros ocho periodistas cayeron abatidos durante el año víctimas de la violencia en Haití, país que enfrenta una grave crisis de seguridad fomentada por la actuación de bandas armadas, protestas contra el gobierno y por el uso excesivo de la fuerza de la policía.
El caso más reciente fue el del periodista Fritz Dorilas, fallecido el 5 de noviembre en la comuna de Tabarre, al noreste de la capital haitiana, cuando fue baleado cerca de su domicilio por individuos armados durante enfrentamientos entre pandillas según informaron medios locales.
Sin embargo, el portal en línea Alaminute.Info señaló que Dorilas, coanfitrión del programa "El derecho, la ley y la justicia" en radio Megastar, fue sacado a la fuerza de su vivienda ubicada en el sector Carradeux, y luego ejecutado cerca de allí en momentos en que ocurría el tiroteo.
En otro hecho, el reportero Romelo Vilsaint murió el domingo 30 de octubre de un balazo en la cabeza mientras protestaba junto con decenas de periodistas en el interior de una comisaría por la detención de otro colega, Robeste Dimanche, de Radio Télé Zenith, quien luego fue puesto en libertad.
Al principio se informó que Vilsaint fue alcanzado por una bomba lacrimógena, pero Gary Desrosiers, portavoz de la Policía Nacional de Haití (PNH), confirmó que el reportero falleció de un "disparo fatal", aunque rehusó hacer más comentarios salvo que se trató de una "lamentable situación".
Las muertes de Dorilas y Vilsaint se suman las de otros seis periodistas: Tess Garry, Radio Lebon FM, 24 de octubre; Frantzsen Charles, FS NEWS, y Tayson Lartigue, Tijèn Jounalis, 11 de septiembre; Maxihen Lazarre, Rois des infos, 23 de febrero; Wilguens Louissaint, colaborador en distintos medios digitales, y Amady John Wesley, radioemisora Écoute FM, 6 de enero de 2022.
Decenas de periodistas marcharon vestidos de blanco el domingo 13 de noviembre en Puerto Príncipe para denunciar el asesinato de sus colegas este año y exigir a las autoridades del país el esclarecimiento de cada caso.
Los periodistas también recordaron a las autoridades la advertencia del Colectivo de Medios en Línea (CMEL), organizador de la marcha, de que los miembros de la organización no cubrirían ninguna rueda de prensa de la policía si la institución se niega a informar sobre los resultados de las investigaciones.
Una resolución sobre Haití, aprobada por la SIP durante su 78ª Asamblea General celebrada el mes pasado en Madrid, España, subrayó que el clima de violencia y la crisis política, económica y de seguridad en la que está inmerso ese país mantienen a los periodistas en una situación de indefensión y de alto riesgo.
La SIP llamó al gobierno haitiano a garantizar la preservación de la libertad de expresión y el ejercicio libre y seguro del periodismo e instó a las organizaciones de prensa de las Américas a expresar su solidaridad y apoyo a los periodistas y medios de comunicación que siguen cumpliendo su misión informativa a pesar de las circunstancias de alto riesgo.