La semana comenzó con el secuestro del periodista mexicano Jaime Barrera en el estado de Jalisco el lunes 11 de marzo. Después de dos días en cautiverio, el periodista fue liberado y actualmente se encuentra sano y salvo. El comunicador ha solicitado ser acogido por el Mecanismo federal de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas y aseguró que no se va a dejar intimidar, según informes de prensa.
Por otro lado, periodistas que cubrían las marchas por el Día Internacional de la Mujer fueron atacadas en varias ciudades de México. Las reporteras fueron detenidas, golpeadas y agredidas con agua, cloro y pegamento.
A su vez, la organización Amnistía Internacional presentó un informe titulado "Nadie garantiza mi seguridad" en el cual concluyen que el 43% de los ataques hacia periodistas mexicanos provienen de funcionarios públicos. En los últimos siete años, ocho periodistas mexicanos han sido asesinados mientras estaban registrados en el Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, según el informe.
En Paraguay, gremios periodísticos y medios de comunicación expresaron preocupación por una posible "judicialización del ejercicio periodístico" en medio de imputaciones contra el expresidente Mario Abdo Benítez. Según abogados en el caso medios y periodistas podría ser citados para "rendir cuentas en lo que se pueda investigar".
El equipo de Todo Noticias en Argentina sufrió amenazas mientras realizaban una cobertura periodística en la ciudad de Rosario, luego de una serie de asesinatos perpetrados por bandas criminales que se oponen al gobierno provincial. "Van a terminar como (José Luis) Cabezas", dice uno de los mensajes que recibieron por WhatsApp, haciendo referencia al fotoperiodista asesinado en 1997, según informes de prensa.
El Colegio de Periodistas de Honduras repudió los ataques hacia la prensa por parte del presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo. El político acusó a los medios de difamarlo tras publicarse denuncias en su contra.
En República Dominicana, el Círculo de Reporteros Gráficos de Televisión denunció que los trabajadores son víctimas de agresiones físicas por parte de ciudadanos y agentes policiales.
La ONG Espacio Público reportó en el mes de febrero un aumento del 70% en las violaciones a la libertad de prensa en Venezuela. Entre los ataques se registraron hechos de intimidación, censura, restricción administrativa, hostigamiento judicial, amenazas y agresiones verbales.
Por su parte, el Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa informó que durante febrero se registraron 40 violaciones a la libertad de expresión en todo el país. Se documentaron ataques, amenazas, agresiones, detenciones arbitrarias, restricción en el espacio digital y uso abusivo del poder estatal.
La SIP es una organización sin fines de lucro dedicada a defender y promover la libertad de prensa y expresión en las Américas. Está integrada por más de 1.300 publicaciones del hemisferio occidental; y tiene su sede en Miami, Florida, Estados Unidos.
