Bolivia

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BOLIVIA Los medios de comunicación informaron ampliamente sobre el estado de convulsión social que vivió el país en las últimas semanas, sin restricciones gubernamentales, aunque se produjeron agresiones aisladas de parte de los campesinos que lanzaron piedras contra algunos periodistas y los vehículos que los transportaban, como fue el caso de El Diario de La Paz. La crisis afectó a la circulación de los periódicos, los que se vieron obligados a limitarla debido a que los insumos importados se quedaron en las fronteras, sin llegar a sus depósitos. Por esta razón se tuvo que recurrir a quienes contaban con existencias, a precios mucho más altos que en el mercado internacional. Además hubo que transportarlo por avión por ejemplo desde la ciudad de La Paz a Cochabamba, como sucedió con el periódico Los Tiempos de esa capital. El 1º de abril diferentes organizaciones de prensa de La Paz rechazaron la decisión del entonces ministro de Informaciones, Ronald McLean, de prohibir a otros ministros que hagan declaraciones en el palacio de gobierno, consiguiendo que se suspenda esa medida. El 8 de abril el gobierno decretó el estado de sitio, medida excepcional que desembocó en que el ejército silencie a emisoras de radio y televisión mediante el corte de energía eléctrica, por más de tres horas. El 9 de abril los trabajadores de tres emisoras de radio, Chaka, de Pucarani; Ondas del Titicaca, de Huarina, y Omasuyos, de Achacachi, que transmitían en cadena situaciones de violencia en la zona de influencia en el lago Titicaca, en el altiplano de La Paz, fueron amedrentados por efectivos militares, provocando la suspensión de sus emisiones. El 10 de abril Canal 39 emitió imágenes captadas por su corresponsal en Cochabamba, que evidenciaban la actuación de un francotirador militar, vestido de civil, en la represión contra los manifestantes. A partir de ese día los periodistas de ese canal recibieron amenazas de muerte por vía telefónica. El 14 de abril se denunciaron amenazas telefónicas contra una periodista del periódico Presencia de la ciudad de La Paz, así como la colocación de una bomba en sus instalaciones, constatándose que era una falsa alarma. En junio un periodista de la población de Villamontes, Esteban Farfán Romero, fue agredido por José Bleichner, concejal de esa localidad. El 11 de junio el periodista Ronald Méndez Alpire, autor de varias investigaciones sobre la corrupción en Bolivia, fue herido por un desconocido, con dos disparos de bala en una pierna. El atentado se produjo en Santa Cruz. Hasta el momento no hay resultados sobre la investigación policial y el apresamiento del responsable. El 6 de agosto el director del periódico La Razón, de la ciudad de La Paz, publicó en su primera página una carta de ese diario al presidente de la República con el título de “El tiempo apremia, señor Presidente”, en la que hace una serie de reflexiones sobre la situación económica, social y política del país. El gobierno, a través de su ministro de Información Gubernamental, Manfredo Kempff, calificó a la mencionada misiva como “insólita, arrogante e inoportuna”. Al rechazar la carta dijo que “la prensa está para criticar, para aconsejar y guiar; pero no para dictar normas ni para tratar de decir cómo se debe gobernar”. Por su parte La Razón, el mismo día, 9 de agosto, en su principal editorial, responde a la autoridad manifestando: “El ministro Kempff se equivoca al equiparar la iniciativa de este medio con la de un partido político. Este diario sólo busca servir –lo mejor posible– a la comunidad y al país. Por eso ha traducido parte de la inquietud general”.

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