*Por Javier Valdivia, especial para la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP)
*Por Javier Valdivia, especial para la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP)
Miami (5 de abril de 2023) — Haití recordó el 3 de abril al periodista Jean Léopold Dominique, cuyo asesinato hace 23 años —todavía sin resolver—, lo convirtió en el símbolo de la libertad de prensa en su país.
Organizaciones gremiales, el gobierno y el principal organismo de defensa de los derechos ciudadanos coincidieron en reclamar a la justicia haitiana "que asuma su responsabilidad" para castigar a los culpables del crimen de Dominique, y para que su muerte no quede impune.
Dominique, que se enfrentó por igual a la dictadura de los Duvalier y al carismático líder Jean Bertrand Aristide, fue acribillado el 3 de abril del 2000, a los 69 años, cuando llegaba a Radio Haitï Inter, la emisora de su propiedad.
La muerte de Dominique causó gran conmoción. El entonces presidente René Préval declaró tres días de duelo oficial y 16.000 personas acudieron a su funeral en la capital haitiana. Michèle Montas, su viuda, y sus tres hijas, se vieron obligadas a huir tres años más tarde a EE. UU. tras el asesinato de su guardaespaldas y de repetidas amenazas en su contra.
La Asociación de Periodistas Haitianos (AJH, por sus siglas en francés) cuestionó este el hecho de que los autores de la muerte de Dominique "anden libres por las calles", y denunció la inacción de las autoridades "que sólo alienta a los asesinos de nuestros colegas a matar con total impunidad en el país".
En un comunicado la AJH señaló que "los trabajadores de la prensa ponen en duda la voluntad real de los gobernantes de esclarecer casos de asesinato de periodistas, incluido el de Dominique".
Por su parte, Jacques Sampeur, presidente de la Asociación Nacional de Medios Haitianos (ANMH), dijo que "este vergonzoso y escandaloso asunto" tiene graves consecuencias para el futuro del sistema judicial y de su propia sociedad.
"Si un periodista de la talla de Jean Léopold Dominique, asesinado a plena luz del día de manera tan espectacular, no obtiene justicia, nadie más lo hará. Es una obstrucción al estado de derecho, una apertura libre otorgada a la impunidad por nuestros líderes pasados o presentes, para que nunca haya un precedente", dijo Sampeur en un comunicado.
En casi dos décadas, unas veinte personas fueron entrevistadas por la justicia local, entre ellos el expresidente Préval y el propio Aristide, varias personas fueron detenidas, algunos testigos o involucrados murieron o fueron asesinados, y al menos el 75% del expediente físico desapareció de los tribunales de justicia.
En el último mandato de Aristide (2000 - 2004), otras seis personas fueron detenidas, pero tres huyeron de prisión y hasta la fecha nadie ha sido condenado.
Guyler C. Delva, secretario general de SOS Journalistes, llamó también la atención sobre otros expedientes de periodistas asesinados cuyos casos siguen abiertos, y condenó "esta escandalosa impunidad que debe terminar porque alimenta en gran medida la corrupción y la inseguridad que ya se ha cobrado tantas víctimas entre la población".
El asesinato del presidente Jovenel Moïse dejó al país en una nueva crisis política debido al vacío de poder que disputan una férrea oposición y el actual primer ministro Ariel Henry cuya designación, presentada por el mandatario dos días antes de su muerte, no pudo ser ratificada por el Parlamento.
Además, el país vive un clima de constante inseguridad debido al accionar de pandillas armadas que controlan gran parte de la capital Puerto Príncipe y en el que los trabajadores de la prensa son blanco fácil de ataques, secuestros y asesinatos.
Al menos nueve periodistas fueron asesinados el año pasado en Haití, el peor para el ejercicio del periodismo en el continente sólo después de México, según la SIP.
En lo que va de año, tres comunicadores fueron secuestrados y puestos en libertad tras el pago de su rescate: Lebrun Saint-Hubert, presidente y director general de la radio comunitaria 2000; Jean Thony Lorthé, presentador del programa "Rafrechi Memwa", emitido por Radio Vision 2000, y Sandra Duvivier, reconocida periodista del área cultural, camarógrafa e integrante del staff de Telemax, canal 5 de TV.
Otros dos periodistas, Edner Décime, de la agencia AlterPresse, y Oscar Joseph, que fue por mucho tiempo coordinador de programas audiovisuales del Ministerio de Educación, también fueron secuestrados y luego liberados en 2022.
Una resolución sobre Haití aprobada por la SIP durante su 78ª Asamblea General en octubre de 2022 en España, subrayó que el clima de violencia y la crisis política, económica y de seguridad en la que se encuentra sumido este país, mantienen en una situación de indefensión y de alto riesgo a los periodistas.
La SIP pidió al gobierno que garantice la preservación de la libertad de expresión y el ejercicio libre y seguro del periodismo, e instó a las organizaciones de prensa de las Américas a expresar su solidaridad y respaldo a periodistas y medios que siguen cumpliendo su misión informativa pese a las circunstancias de alto riesgo.
"Asesinaron a un hombre, pero no a una profesión, no a un pensamiento", dijo el titular de la Oficina de Protección al Ciudadano, Renan Hédouville, en un comunicado, con motivo del 23 aniversario del asesinato de Jean Dominique.
"Dominique fue un defensor de los derechos humanos que usó el micrófono para luchar por los más débiles", destacó por su parte el Ministerio de Cultura y Comunicación, en un tuit en el que también saludó la memoria del periodista.
En 2014, el juez Ivickel Dabrésil presentó un informe que involucraba a 14 colaboradores del expresidente Aristide en la muerte de Dominique, entre ellos una exsenadora, Mirlande Libérus Pavert, señalada como la autora intelectual del crimen.
Libérus, que fue defendida por Aristide, fue acusada de planificar el asesinato de Dominique por Oriel Jean, ex jefe de seguridad presidencial del exgobernante, que también testificó ante la justicia.
Jean aseguró que la exsenadora, que reside en Estados Unidos, tenía la misión de "silenciar" al periodista porque interfería en los intereses de Lavalás de retener el poder en el 2000.
El informe de la División de Investigación Criminal de la Corte de Apelaciones de Puerto Príncipe, a cargo de Dabrésil, involucró también a la sacerdotisa vodou Annette Auguste, alias Sô Ann, militante del partido Lavalás, fundado por Aristide, y al ex vicealcalde de Puerto Príncipe, Gabriel Harold Sévère.
*Javier Valdivia es un periodista radicado en Miami. Experto en Haití. Fue subjefe de Redacción del periódico Listín Diario de República Dominicana. Ex corresponsal de la agencia estatal china Xinhua en Haití y República Dominicana.