En este período se registraron varios intentos de desacreditar la integridad de periodistas y medios de comunicación durante el proceso electoral que culminará en 2025.
Ante estos hechos, los líderes de los principales grupos políticos, el Partido Laborista de Jamaica (JLP) y el Partido Nacional del Pueblo (PNP), han instado a sus seguidores a cesar los ataques a la prensa y grupos de la sociedad civil.
El 7 de octubre, se difundió un video en línea que acusaba a seis periodistas del diario The Gleaner de estar vinculados con el partido opositor PNP y de ser utilizados para sabotear al Gobierno. Las imágenes de los seis reporteros se compartieron acompañadas de ataques a la integridad profesional.
A través de su director general, Anthony Smith, el RJRGLEANER Communications Group rechazó las acusaciones, afirmando que el contenido era falso y engañoso.
La Asociación de la Prensa de Jamaica (PAJ) condenó los ataques a periodistas y medios en respuesta a las acusaciones de partidarios de ambas fuerzas políticas que vinculan a los medios con uno u otro partido. Asimismo, expresó preocupación por las declaraciones recientes del presidente del PNP y líder de la oposición, Mark Golding, quien en la conferencia anual del partido sugirió que algunas empresas mediáticas están "alineadas con el JLP".
Mientras tanto, simpatizantes del PNP acusaron al director general adjunto del Jamaica Observer de influir en la política editorial del medio, y el diputado del JLP, Everald Warmington, afirmó en un acto político que el RJRGLEANER Communications Group tiene una agenda contraria al primer ministro, Andrew Holness.
En respuesta a una carta de la jefa de redacción de The Gleaner, Moya Thomas, que expresaba preocupación por la seguridad de los periodistas e instaba al partido a distanciarse públicamente del video, el secretario general del JLP, Horace Chang, declaró que su partido no era responsable del video en cuestión y que "no hubiera aprobado tal actividad".