Palabras del presidente de la SIP
Michael Greenspon (NYT)
Inauguración de la 79ª Asamblea general de la SIP
9 de noviembre de 2023
Buenas tardes, antes de comenzar oficialmente esta inauguración quiero decirles que en esta mesa inaugural nos sentimos y estamos incompletos.
Como es costumbre de la SIP, en cada asamblea general invitamos a los presidentes de los países que visitamos, incluso aquellos que no respetan la libertad de prensa o no tienen buenas relaciones con los medios de comunicación y periodistas independientes.
De las 79 asambleas generales, en un 90% de los casos los presidentes asistieron, incluso las que realizamos aquí en México en el pasado.
Esta vez estamos sorprendidos de que el presidente Andrés Manuel López Obrador no haya aceptado nuestra invitación y que tampoco el Gobierno haya enviado a algún representante para expresar sus ideas o sus críticas y reclamos. Era el momento más apropiado de hacerlo, en una asamblea donde se puede debatir. Sabemos que el presidente tiene otro estilo de comunicación con los periodistas.
También hemos invitado a la precandidata Claudia Sheinbaum, quien ha declinado nuestra invitación para que exprese sus ideas en materia de libertad de prensa hacia el futuro.
Lamentamos esta actitud del gobierno de México. Dije que nos sentimos incompletos en esta mesa, pero también quiero decirles que nos sentimos fortalecidos en nuestra convicción de la importancia que tiene la libertad de prensa y el debate de ideas en la democracia. No reconocer el valor de la libertad de prensa, es menospreciar el valor de la democracia.
Es un honor para la SIP reunirnos en México a pocos meses de que nuestra Declaración de Chapultepec cumpla 30 años, inspirada en este país y redactada en el emblemático Castillo de Chapultepec. Muchos de ustedes estuvieron en marzo de 1994 en esa gesta que reunió a más de 120 líderes de opinión entre los que se destacaban el Premio Nobel Octavio Paz y que fue dirigida por Javier Pérez de Cuéllar, el ex secretario general de la Organización de las Naciones Unidas.
Pérez de Cuéllar dijo entonces una frase que después de 30 años sigue teniendo vigencia: "El futuro de las Américas encuentra un enorme reto, la defensa y la promoción de la libertad de expresión como vehículo para la defensa y la promoción de la democracia".
La Declaración de Chapultepec nos sirvió de guía para hacer más concreto nuestro trabajo y crear conciencia y promover la libertad de prensa como valor fundamental de la democracia. Organizamos eventos internacionales con legisladores, magistrados, académicos y puedo decir que la SIP fortaleció y enfocó mejor su lucha con los 10 principios que recoge la Declaración. También nos ayudó para que los líderes de estos últimos 30 años se comprometieran a respetar la libertad de prensa, aunque sabemos que no todos los firmantes cumplieron sus obligaciones. Hoy tendremos el honor de que las precandidatas a la Presidencia, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, firmen Chapultepec. Y esperamos que el próximo gobierno sea más respetuoso con la libertad de prensa que el actual.
También en esta asamblea habrá otro hito. Nuestra Declaración de Salta cumple cinco años desde que la aprobamos en la asamblea de 2018 en Salta, Argentina. Tuvimos la visión entonces de que el internet y las nuevas tecnologías de la comunicación nos obligaban a actualizar nuestra postura frente a la libertad de prensa y expresión. Después de un largo camino de más de un año, durante la presidencia de Gustavo Mohme, consultando a más de un centenar de representantes legales, académicos, tecnológicos y periodísticos, gestamos los 13 principios de la Declaración de Salta concebidos como otra herramienta para lograr mayor eficiencia en la defensa y promoción de la libertad de expresión en el ecosistema digital.
Desde hace semanas, y en esta Asamblea, iniciamos un proceso de actualización de la Declaración de Salta para incorporarle los recientes y nuevos desafíos que han traído la IA, las nuevas tecnologías y las regulaciones que se están implementando a nivel global, entendiendo que algunas de ellas se alejan de preservar las libertades de prensa y expresión.
Invito también a esta Asamblea a enfocarnos en los desafíos por el cuidado de la libertad de prensa. Desde nuestra última reunión en abril, los crímenes contra periodistas se mantienen con el principal flagelo: Ocho periodistas fueron asesinados, cuatro en este país, dos en Guatemala, uno en Colombia y otro en Haití.
También debemos reclamar que siguen encarcelados los periodistas Víctor Ticay en Nicaragua y Lázaro Valle Roca en Cuba. Justamente estos dos países, además de Venezuela, como veremos mañana en los resultados del Índice Chapultepec, continúan en los últimos lugares del barómetro como hace ya cuatro años. Estamos esperanzados con el anuncio judicial en Guatemala de que se iniciará un nuevo juicio contra José Rubén Zamora que permanece injustamente encarcelado en represalia por sus denuncias por corrupción. Haber visitado a José Rubén en la cárcel para mostrarle nuestra solidaridad y expresarle que nunca abandonarías su caso, fue una de las experiencias más impactantes que he tenido este año como presidente de la SIP.
Y, en este sentido, más allá de seguir reclamando por la liberación del periodista Evan Gershkovich, corresponsal de Wall Street Journal, en Rusia, expresamos nuestra solidaridad a los familiares y colegas de las decenas de periodistas muertos en las guerras Rusia-Ucrania y Hamas-Israel.
Quiero destacar nuestra satisfacción que el régimen de Nicaragua haya liberado a tres periodistas, dos de ellos directores de la SIP, Juan Lorenzo Holmann y Miguel Mora, y también a Miguel Mendoza, aunque se trata de una vitoria agridulce, por cuanto ellos, así como otros periodistas, están en el exilio expatriados, después de haber sido despojados de su nacionalidad y de que el gobierno les robó sus bienes y patrimonio. También estamos complacidos que el periodista Roland Carreño de Venezuela haya sido liberado hace un par de semanas.
Respecto a la violencia y persecución contra periodistas, quiero destacar que muchos periodistas debieron salir al exilio, en especial desde Cuba, Nicaragua y en especial de Ecuador, después del asesinato del periodista y candidato a presidente, Fernando Villavicencio. La violencia, pero también la desinformación en durante las campañas electorales serán temas que escucharemos en paneles y en los informes de libertad de prensa.
En ese contexto político de polarización que se agudiza en las campañas electorales, no podemos dejar de alzar nuestra voz para denunciar la estigmatización de parte de los líderes de países, como ocurre comúnmente en este país, en El Salvador, Bolivia, Colombia y Venezuela. Además del maltrato a periodistas durante las protestas sociales que deben cubrir.
También en esta asamblea escucharemos puntos positivos en materia de libertad de prensa. Como una ley de protección para periodistas que se está aprobando en Chile, una orden judicial en Colombia para proteger a las mujeres periodistas de la violencia, así como la sentencia de la Sala Constitucional de Costa Rica que condenó la estigmatización del presidente Rodrigo Chaves en contra de medios y periodistas.
La crisis que afecta a nuestra industria y los desiertos informativos que genera siguen siendo motivos de alarma. A partir de esta mañana con Alberto Ibargüen y durante esta asamblea, iremos viendo la importancia de fortalecer el periodismo local para sostener la democracia y, también, veremos cómo los medios y las organizaciones están generando nuevas formas de ingresos para cambiar el modelo tradicional de negocios que estuvo sustentando en los ingresos por publicidad.
Me satisface mucho que después de arduas y largas negociaciones con Google logramos un acuerdo formal en agosto de 2022 en Miami, lo cual nos permitió relanzar nuestra alianza y seguir trabajando por la sustentabilidad de los medios de comunicación ya sean socios o no de la SIP.
Los logros concretos están a la vista, más allá de que también seguimos reclamando a Google que expanda programas de licenciamiento de contenidos en América Latina, como el programa Showcase. Continuamos apoyando a la News Media Canadá y esperamos que se implemente la ya aprobada Online News Act y a la News Media Alliance con el proyecto de Journalism Competition and Preservation Act.
Ambas legislaciones serán importantes para impulsar a las plataformas a que paguen un precio justo y razonable por los contenidos periodísticos que distribuyen, tal como venimos batallando desde 2021.
Decía que estoy satisfecho con Google porque en el acuerdo que se cristalizó este año y esperamos que continúe en el futuro, incluyó un patrocinio institucional y, además, un patrocinio especial con el que creamos el Lab Enhanced Fundamentals y otro para un programa de libertad de prensa con nuestro proyecto Redacciones + Seguras, que empezará en esta Asamblea, el sábado, para ayudar a 15 medios del interior de México a crear sus protocolos de seguridad y prevenir la violencia.
El Lab incluye a 80 medios latinoamericanos. Empezó con 40 de Centroamérica y el Caribe y a comienzos de 2024 seguirá en Sudamérica con 40 más. Está dirigido a medios que todavía no reciben beneficios de otros programas de Google como Showcase. Cada laboratorio consta de un semestre de duración y, al final de los cursos, cada medio participante puede solicitar fondos para resolver problemas específicos en sus operaciones hasta por $20.000 dólares cada uno.
También este ha sido un año con mucha actividad por el fortalecimiento de los medios y el periodismo. El regreso de la conferencia SIPConnect a la presencialidad, en Miami, fue recibido con mucho entusiasmo y, por tercer año consecutivo, coorganizamos la Cumbre Mundial Sobre Desinformación con participantes de 52 países.
Además, tuvimos 120 participantes en cuatro diplomados universitarios sobre Periodismo y Libertad de Expresión y nuestro programa de webinars alcanzó a más de mil participantes. Mantuvimos varias campañas a favor de la libertad de prensa y la sustentabilidad de los medios en YouTube y el resto de las redes sociales.
Como ya lo hemos anunciado, al finalizar esta Asamblea General el domingo no solo tendremos a un nuevo presidente de la SIP, sino también a un nuevo director ejecutivo, Carlos Lauría. Estoy seguro de que la experiencia profesional de Carlos combina perfectamente con nuestra misión de promover y defender la libertad de prensa y su sensibilidad por el periodismo y los medios de comunicación nos aporta una nueva visión para ayudar a sobrellevar la crisis que atraviesa nuestra industria.
Elegir a Carlos no fue tarea sencilla para el Subcomité de Transición que creé el año pasado en Madrid cuando Ricardo oficialmente nos informó que se retiraría este próximo 31 de diciembre. Quiero destacar que organizamos el proceso sin necesidad de gastar dinero en una empresa de head hunter. Anunciamos la búsqueda el 17 de abril, a través de Indeed con el apoyo de personal del New York Times y también a través de nuestra Junta de Directores y de socios de la SIP.
Luego de tres meses de recibir y seleccionar candidatos, llegamos a mediados de agosto con cuatro finalistas, de un total de 107 aspirantes 38 mujeres y 69 hombres, de 18 países, la mayoría de EE.UU. y Latinoamérica, pero también de países distantes como Irlanda y Alemania.
Quiero agradecer a los integrantes del Subcomité por el excelente trabajo. En junio los integrantes del Comité Ejecutivo nos ayudaron a reducir una lista de 30 pre finalistas a 11. Desde ahí hicimos más 100 entrevistas personales. Las primeras a 11 pre finalistas y luego a los cuatro finalistas. Finalmente, a mediados de agosto Carlos fue el elegido y desde el 1 de septiembre se unió a nuestra oficina para trabajar junto a Ricardo y adquirir experiencia en el manejo de los asuntos de la SIP para cuando asuma este 12 de noviembre.
Por último, quiero dedicar esta Asamblea a todos los medios y los socios de la SIP que todos los días ofrecen su trabajo voluntario, con esfuerzo y dinero, para que podamos cumplir nuestra misión en defensa de la libertad de prensa. Desde nuestra oficina en la SIP hicimos un excelente trabajo en recopilar el trabajo y las acciones de los socios de la organización.
Durante este año, 436 personas dispensaron un total 4.153 horas de trabajo en todas las tareas de la SIP, desde vicepresidentes escribiendo informes, expertos para el Índice de Chapultepec, socios que trabajaron en comisiones como las de Premios, Becas o Nuevos Socios, conferencistas y expertos en nuestras actividades y las autoridades que me ayudaron a liderar esta organización.
A todos ustedes quiero agradecerles por su trabajo, su solidaridad y su visión de que no se puede concebir una democracia sin periodismo y sin libertad de prensa.
Muchas gracias.