En este período continuaron los riesgos para el ejercicio del periodismo, en especial contra reporteros que informan sobre la administración de Gobierno.
El presidente del Colegio de Periodistas de Honduras, Osman Reyes, denunció que existen altos grados de intolerancia a la crítica en la Administración Pública y que se estigmatiza a los periodistas para desacreditar sus labores.
El 28 de enero fue asesinado el periodista Luis Alonso Teruel Vega, de Pecaligüe Televisión, en Atima, Santa Bárbara. Teruel Vega fue bajado de su vehículo y atacado por varios hombres. Fue trasladado a un centro de salud, pero murió minutos después.
El periodista Francisco Javier Ramírez Amador, reportero y presentador del noticiero del Canal 24, fue asesinado el 21 de diciembre en Danlí, El Paraíso. Contaba con medidas de protección del Estado, pero su escolta policial no pudo impedir el ataque y también fue herido. Ramírez Amador ya había sobrevivido a otro atentado, por lo que estaba en el Sistema de Protección para las y los Defensores de Derechos Humanos, Periodistas, Comunicadores Sociales y Operadores de Justicia.
La directora ejecutiva de la Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos (Asopodehu), Dina Meza, denunció que otros periodistas fueron amenazados de muerte.
Continúan impunes 98 asesinatos en contra de periodistas, ocurridos en los últimos 20 años.
En medio de la violencia, existe un modesto esfuerzo para mejorar el Mecanismo de Protección, con la cooperación de organismos internacionales.